San Vicente de la Baquera. Ohne den Jakobsweg hätte ich mich mit diesem Dorf wohl niemals beschäftigt und hätte hier auch keine Übernachtung gebucht. Ein Motiv der Wanderung ist aber auch das Land und eben solche Städtchen kennen zulernen. Mit knapp 3.500 Einwohnern ist die Größe des Ortes überschaubar. Die Haupteinnahmequelle ist der Tourismus.
San Vicente de la Baquera wird als traditionelles Fischerdorf und als malerische Ortschaft beschrieben. Bei der Betrachtung der im Internet zu sehenden Bilder, kann ich mich dem Urteil nur anschließen. Das erste Bild zeigt im Vordergrund das Meer mit Fischerbooten, im mittleren Teil eine Ortschaft auf der linken und eine schöne Brücke auf der rechten Seite. Über der Stadt erheben sich eine Kirche und eine Burg. Im Hintergrund sind verschneiten Berge aus dem Nationalpark Picos de Europa zu sehen. Auch die restlichen Bilder lassen ebenfalls eine Urlaubsstimmung aufkommen. Durch die Nähe zum Nationalpark Picos de Europa oder zum landschaftlichen reizvolle Tal Valle del Nansa ergeben sich neben dem Strandurlaub auch gute Möglichkeiten zu einigen Wanderungen .
Der Ort liegt an einer weiten geschwungen Flussmündung umgeben von grünen Hügeln. Die beiden Flüsse in der Gemeinde sind der Escudo und der Gandarilla. Die 600 Meter lange Brücke "Puente de la Maza" die über die Ria führt ist ein Wahrzeichen der Stadt. Ria bedeutet das es sich um einen Meeresarm handelt, der in die Küste hineinragt und der Einwirkung der Gezeiten ausgesetzt ist. Die Brücke wurde im 16. Jahrhundert gebaut und hat 28 Bögen. Auf der anderen, der östlichen Seite der Brücke, liegen zahlreiche lange Sandstrände, wie El Rosal, Merón, Gerra, bis zum Playa de Oyambre. Diese Strände umschließen in einem Halbkreis den Nationalpark Oyambre. Auf der westlichen Seite sind kleinere Buchten zu finden. Hier gilt es vorher die Baquera-Brücke zu überqueren.
Ein weiteres Wahrzeichen der Stadt ist die Burg, das Castillo de San Vicente. Im Zuge der Wiederbesiedlung nach dem Sieg über die Mauren im VIII Jahrhundert ließ Alfons I. die Burg errichten. Die Burg war Teil der Stadtbefestigung, neben der Stadtmauer, und die Stadt wuchs um die Burg herum. Die wuchtige, gotische Kirche Santa Maria de los Angeles ist das nächste Wahrzeichen der Stadt. Der Bau wurde unter Alfons III. im 13 Jhd. begonnen und 14 Jhd. Fertiggestellt. Sie gehört zu den bedeutendsten Kirchenbauten in Kantabrien. Neben der Kirche befand sich ein Krankenhaus von dem heute aber nur noch Ruinen erhalten sind. Hinter der Kirche gibt es einen Aussichtspunkt mit einem herrlichen Blick über Wiesen und Wälder bis hin zu den Picos de Europa.
Mit dem heutigen Blick auf das Örtchen und seinen 3.500 Einwohner ist es vielleicht schwer nachzuvollziehen, aber die Stadt hatte wirklich wirtschaftlichen und politischen Einfluss. Mit den anderen Städten, Castro Urdiales, Laredo und Santander gehörte die Stadt dem Handelsverbund der vier Städte an die unter anderem für Freiheit und Fischereirechte im Seehandel einstand. Der Verbund wurde 1296 unter dem Namen einer Bruderschaft gegründet. Diese existierte bis 1490. Dann schloss man sich neu zusammen, unter dem Namen "Bruderschaft der vier Dörfer".
Zu erwähnen ist die lange Tradition der Fischerei. Die Fischer von San Vicente waren im Norden bis Neufundland und im Süden bis zu den kanarischen Inseln unterwegs.
San Vicente de la Baquera. Sin el camino de Santiago, el pueblo nunca hubiera llamado mi atención y tampoco hubiera reservado un alojamiento allí. Un motivo del camino es conocer el país y pueblos como este. Con sus 3.500 habitantes, el tamaño del pueblo puedo pasar desapercibido. El turismo es su principal actividad económica.
La descripción de San Vicente de la Baquera es como un pueblo pesquero tradicional y descrito como un lugar pintoresco. Después de ver unas fotos en Internet, puedo afirmarlo.
La primera foto muestra en primer plano el mar con barcos de pescadores, más arriba en la parte izquierda hay unas casas y a la derecha se ve un puente hermoso con arcos. Lo llamativo esta más arriba, el castillo y sobre todo una iglesia muy grande. En el fondo hay unas montañas, cubiertas con nieve, del Parque Nacional Picos de Europa. Es un buen ambiente para unas vacaciones. Por la cercanía al parque nacional se puede unir vacaciones en la playa con el senderismo en el parque nacional o más cerca en el Valle del Nansa.
El pueblo se halla en una ría ancha y curvada, rodeada de verdes colinas. Los ríos se llaman Escudo y Gandarilla. El "Puente de la Maza" con su longitud de 600 metros sobre la ría es un emblema del pueblo. Ría en este caso, significa que es un brazo de mar y está expuesta a la acción de las mareas. El puente fue construido en el siglo XVI y tiene 28 arcos. Cruzando por el puente, al lado este, encontramos varias playas como: El Rosal, Merón, Gerra, hasta la Playa de Oyambre. Estas playas encierran en semicírculo el Parque Nacional de Oyambre. En la parte oeste hay unas calas pequeñas. Para llegar a ellas uno tiene que cruzar por el puente baquera.
Otro símbolo del pueblo es el Castillo de San Vicente. Fue renovado a finales de los 90 y se puede visitar. Junto con la repoblación de esta zona, despues de la victoria sobre los moros en el siglo VIII., el rey Alfonso I mandó la construcción del castillo. Era parte de la fortaleza y el pueblo crecía alrededor del castillo. La imponente iglesia Santa María de los Ángeles, en su estilo gótico, es un emblema más. La construcción empezó bajo el mando de Alfonso III. en el siglo XIII y fue finalizado en el siglo siguiente. Es una de las iglesias mas importantes en Cantabria. Al lado de la iglesia había un hospital, pero hoy en día solo se puede ver las ruinas. Cerca de la iglesia hay un mirador que ofrece una vista especular de los Picos de Europa.
Con la vista de hoy al pueblo, es más, con sus 3.500 habitantes, podría ser un poco difícil imaginarnos el papel que jugaba San Vicente de la Baquera en la Edad Media. Tuvo una influencia económica y política. Con las villas, Castro Uridales, Laredo y Santander pertenecía al "Corregimiento de las Cuatro Villas de la Mar de Cantabria" y al antecesor "La hermandad de las Marismas". Fueron uniones con mucho poder y luchaban, entre otras cosas, por la libertad del comercio marítimo.
La última cosa en ese contexto es la tradición de los pescadores que llegaron al norte hasta Terranova y al sur hasta las Islas Canarias.
San Vicente de la Baquera und die Strände / .... y la playas
Der positive Eindruck von den Bildern aus der Vorbereitung hat sich bestätigt. Wer im Sommerurlaub herkommt, hat tolle Strände in der Umgebung, mit dem Restaurant Sotavento eine Top Adresse im gastronomischen Bereich, im Hinterland gibt es unzählige Wandermöglichkeiten und die sehenswerte Höhle El Soplao ist in weniger als einer halben Stunde erreicht.
Zugegeben, die sehenswerten historischen Gebäude mit der Kirche und der Burg sind schnell besucht und es gibt nicht viel mehr zu sehen. Im Vordergrund stehen eindeutig die tollen Strände in der Umgebung und die gemütliche Atmosphäre im Ort. Ein Spaziergang zum Hafen und zum Leuchtturm bietet immer wieder schöne Ausblicke.
In der Vorsaison, als ich hier Station auf dem Jakobsweg gemacht habe, war die Atmosphäre sehr angenehm. Ob das in der Hochsaison so ist, darf bezweifelt werden, aber das ist an der ganzen kantabrischen Küste wohl nicht anders.
Mein Fazit, ich komme wieder hierher, nicht gerade ab Mitte Juli bis Ende August, aber ansonsten jederzeit.
La impresión positiva de las fotos de la preparación se ha confirmado. Si viene aquí en vacaciones de verano, hay estupendas playas en la zona, el restaurante Sotavento es una dirección superior en el sector gastronómico, hay innumerables oportunidades de senderismo en el interior y la cueva de El Soplao, que vale la pena ver, se puede llegar en menos de media hora.
Es cierto que los edificios históricos dignos de ver con la iglesia y el castillo se visitan rápidamente y no hay mucho más que ver. Las estupendas playas de la zona y el ambiente acogedor de la ciudad son claramente los principales atractivos. Un paseo hasta el puerto y el faro siempre ofrece hermosas vistas.
En temporada baja, cuando me detuve aquí en el Camino de Santiago, el ambiente era muy agradable. Es dudoso que esto sea así en temporada alta, pero probablemente no sea diferente en toda la costa cantábrica.
Mi conclusion es que volvere aqui, no exactamente de mediados de julio a finales de agosto, pero si en cualquier otro momento.